Campaña Manos Unidas 2024: El Efecto Ser Humano «La única especie capaz de cambiar el planeta»
En Manos Unidas, se empeñan en transmitir cómo la crisis medioambiental resuena en millones de corazones, especialmente en el Sur global, afectando sus derechos fundamentales: a la alimentación, al agua potable, a la salud, a una vida digna y a un entorno saludable. Esta realidad engendra una gran injusticia climática.
Con su nueva campaña, elevan su voz en defensa del planeta, porque creen que cuidarlo es el sendero hacia la dignidad humana. Bajo el inspirador lema «El Efecto Ser Humano», buscan concienciar sobre cómo el maltrato al planeta reverbera al otro lado del mundo, resaltando el doble poder del ser humano para transformar: para bien y para mal. Son «la única especie capaz de cambiar el planeta».
Este año, no simplemente hablan del cambio climático en general; destacan una injusticia: cómo la desigualdad medioambiental afecta a millones, principalmente en el Sur global, privándolos de sus derechos más básicos. Hablan de una injusticia climática que engendra hambre y pobreza. Las personas más vulnerables carecen de recursos para enfrentar estas situaciones y son las más afectadas por las formas de consumo y producción de los países desarrollados.
Las variaciones climáticas no impactan por igual. Mientras algunos pueden hacer frente a las adversidades climáticas, millones son vulnerables a los impactos negativos del clima cambiante. La alta vulnerabilidad se refleja en la hambruna en el Corredor Seco Centroamericano, la contaminación de las aguas, la subida del nivel del mar y los desplazamientos forzosos, afectando ya a más de 800 millones de personas.
Por todas estas razones, en Manos Unidas creen que la verdadera lucha contra la injusticia climática debe partir de la convicción de la «deuda ecológica» entre los países del Norte y del Sur, como lo ha señalado el papa Francisco.
Desde su fe en la Creación, urgen al compromiso personal con los «descartados climáticos» y solicitan una acción global justa contra el cambio climático, centrada en los más vulnerables. Como dice el papa Francisco, «se necesita una acción urgente, valiente y responsable».
Somos la única especie con el poder de frenar la desigualdad ante la injusticia climática que, en gran medida, hemos causado por nuestra forma de consumir y producir. Así, podemos forjar un planeta sostenible, sin pobreza, sin hambre ni desigualdad, convirtiéndolo en una casa común para una vida digna y sin exclusión.
El compromiso de la sociedad y la comunidad internacional es esencial. Las experiencias y testimonios de las comunidades locales respaldadas por sus proyectos les muestran la relación entre la pobreza, el hambre y la inequidad climática a nivel global. Trabajando en redes como CIDSE y Enlázate por la Justicia, abordan el impacto de la injusticia climática sobre los más pobres.
¡Juntos, podemos construir un futuro donde el respeto por nuestro planeta sea el cimiento de la justicia y la equidad!
Más información: Campaña Manos Unidas 2024