Compartimos algunos testimonios de la experiencia vivida durante el cursillo de novios del pasado fin de semana (del 15 al 17 de marzo). Este encuentro significativo culminó en la Eucaristía del domingo, donde unimos nuestros corazones con toda la comunidad en un vínculo de amor y fe.

Durante este fin de semana hemos tenido la suerte de compartir con otras parejas el cursillo de novios para prepararnos para el gran paso que vamos a dar, recibir el Sacramento del Matrimonio.

Ha sido un curso muy enriquecedor, ya que los catequistas eran parejas que han compartido sus experiencias de vida con nosotros mostrándonos la presencia de Dios en el matrimonio, y cómo se descubre el amor de Dios reflejado en el amor con nuestra pareja. (José Luis y Rosana)

Somos una pareja de novios que participa activamente en las actividades parroquiales.

Estamos muy agradecidos a todos los matrimonios que han abierto en canal su corazón para hacernos descubrir la grandeza de este maravilloso sacramento. Nos ha ayudado mucho a sentirnos, aún más, parte de esta gran comunidad y a descubrir que no estamos solos.

Queremos destacar algunas cosas: nos ha encantado la naturalidad y sencillez con la que han hablado de cómo Dios se ha hecho presente en sus vidas, especialmente en los momentos de dificultad. También, los temas tan importantes que se han impartido, fundamentales para vivir una vida matrimonial en plenitud. Finalmente dar las gracias a la parroquia y a los catequistas por su esfuerzo y sacrificio en esta preparación para el proyecto más grande de nuestras vidas. ¡Gracias! (José Luis y Alba)

Que estas palabras de aliento y gratitud nos impulsen a seguir construyendo relaciones sólidas y llenas de amor en nuestra comunidad. Recordemos siempre que juntos, con el apoyo de nuestra fe y el amor de Dios, podemos superar cualquier obstáculo y alcanzar nuevas alturas de felicidad y realización.

¡Que la luz y el amor que experimentamos durante este cursillo continúen iluminando nuestros corazones y nuestras vidas!