El sábado 8 de junio, las catequistas de comunión, junto con algunos de nuestros seres queridos y el padre Luis, hemos disfrutado de un día inolvidable. Partimos de Villalba a las 9 de la mañana, y nada más llegar a Alba de Tormes, celebramos la Eucaristía en la Basílica de las Carmelitas, justo donde yace Santa Teresa de Jesús. Este momento fue profundamente significativo para todos nosotros.
Tras la misa, visitamos el museo con la guía de un experto que nos explicó con gran detalle cada pieza. Nos conmovió especialmente ver las reliquias del brazo izquierdo y el corazón de Santa Teresa, una experiencia que nos llenó de devoción. A lo largo de la visita aprendimos mucho sobre su vida y obra. Santa Teresa de Jesús, conocida por su profunda espiritualidad y su reforma del Carmelo, nos enseñó el valor de la paciencia, y la importancia de una vida dedicada a Dios.
Aunque el tiempo era limitado, no quisimos perdernos la exposición «De Claris Mulieribus», que también nos resultó muy interesante. Llegada la hora de comer, nos dirigimos al restaurante «La Alameda», donde disfrutamos de una comida deliciosa que fue del agrado de todos. Además, nuestro párroco nos sorprendió con una rifa durante los postres, añadiendo un toque de alegría y compañerismo a la jornada.
Por la tarde, exploramos el castillo, cuya torre ofrece un mirador con vistas espectaculares. También visitamos el museo alfarero, situado en una iglesia mudéjar desacralizada, un edificio de gran belleza. La iglesia de San Juan fue otra parada destacada, con su impresionante conjunto escultórico de «El Salvador y los apóstoles».
Antes de regresar, tuvimos tiempo para comprar unos dulces típicos de la región.
Estamos profundamente agradecidos a nuestros anfitriones locales (Mari Carmen y Manolo), que nos guiaron con cariño y conocimiento. Ha sido un día fantástico, lleno de aprendizaje sobre Santa Teresa de Jesús y enriquecido por el acompañamiento y la guía espiritual de nuestro párroco.
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