Con motivo del Día Internacional de los Voluntarios que se celebra el 5 de diciembre, Cáritas ha difundido un manifiesto en el que hace un profundo reconocimiento del valor de los voluntarios que toman partido en la historia de la humanidad y se convierten en agentes de cambio para trabajar por el bien común y transformar la realidad de las  personas empobrecidas.

Este es el texto de Manifiesto:

Manifiesto de Cáritas en el Día Internacional
del Voluntariado, 5 de diciembre de 2017

“Ustedes marcan el paso para que la Iglesia
esté cada día en el mundo…
Ustedes son las mismas manos
de Jesús en el mundo.
Su testimonio ayuda a cambiar el curso de la vida
de muchas personas, de muchas familias
y de muchas comunidades. Su testimonio
les ayuda a cambiar el curso de su propio corazón”.
Papa Francisco

En el Día del Voluntariado, Cáritas quiere dar las gracias a tantas personas comprometidas que se dan a sí mismas para ayudar a los demás. Personas que ponen su granito de arena para mejorar el mundo en el que viven. Personas que no quedan indiferentes ante el sufrimiento de su prójimo y se movilizan, se implican, se ponen manos a la obra.

En estos tiempos donde hay tantas situaciones injustas que provocan pobreza, exclusión y vulneración de Derechos, queremos reconocer la entrega de tantas personas que, desde su opción de voluntariado, están siendo luz de esperanza con su solidaridad, gratuidad, fraternidad y compromiso.

Y es que para el voluntario de Cáritas, comprometerse, es un modo de ser, de relacionarse, de entender la vida y compartirla creando fraternidad. Para el voluntario de Cáritas, la solidaridad no es un sentimiento de vaga compasión o de superficial ternura hacia los males de tantas personas cercanas y lejanas, al contrario, es la determinación firme y perseverante de empeñarse en el bien común.

El voluntariado está llamado a seguir en el empeño de crear espacios de humanidad y de encuentro, donde las personas excluidas, empobrecidas, heridas, olvidadas… se sientan en familia, acogidos, escuchados, sientan que son importantes para alguien.

Cáritas agradece y pone en valor el que los voluntarios tomen partido en la historia de la humanidad y se conviertan en agentes de cambio capaces de poner a la persona, en el centro de nuestra mirada, palabra y acción. Y como desde su compromiso toman postura ante la realidad de tantas personas empobrecidas.

Si vivimos entregados a este compromiso de mejorar la vida de los que están caídos en nuestro entorno, estaremos contribuyendo a mejorar este mundo. Estaremos haciendo posible un “cielo nuevo y una tierra nueva donde habite la justicia” (2P 3, 13).