Cómo distinguir la voz de Dios de las propias voces interiores

Existen fuerzas que intervienen en nuestro discernimiento; no obstante, el punto de punto de partida es: el amor como única fuerza, que se puede distorsionar y causar actos lesivos a sí mismo y a los demás, y esto por razones de carencia, déficits personales, ignorancia, inmadurez, miedo, etc… Todo esto se cuece en el corazón y es necesario escuchar el propio corazón. Nosotros escuchamos la televisión, la radio, somos maestros de la escucha, pero ¿sabemos escuchar nuestro corazón?, ¿mi corazón como está qué me dice?, ¿está satisfecho, está triste, busca algo?

Hay dos fuerzas, que brotan de una misma fuente, el amor, solo que en uno de ellos está dolido, se ha distorsionado.

Hay aspectos que influyen en la vivencia de nuestra historia personal:  nuestro estilo de personalidad, rasgos de carácter, amor dolido, amor sano, contexto cultural-social, traumas, necesidades psicológicas, formas de pensamiento, historia familiar, dificultades en el sentir y expresar las emociones etc. La importancia que tiene todo esto en la vida espiritual es crucial…

Sería necesario que en el proceso de discernimiento tuviéramos en cuenta:

  • Los contratiempos
  • Conocerse a sí mismo
  • Las Contraseñas espirituales
  • La honda ignorancia
  • El “darse cuenta”
  • El feedback

Para acceder a todas las sesiones: Curso de Discernimiento Espiritual