Cómo distinguir la voz de Dios de las propias voces interiores

En esta sesión iniciamos un nuevo tema, en el que, algunas de las claves que hemos visto son:

En todo discernimiento se examina no solo lo que sentimos como impulso sino el objetivo pretendido. Lo que es de Dios viene envuelto en sentimientos de verdadera consolación: paz profunda, lleno de fe, esperanza y amor; se aparta de lo rastrero de este mundo, mantiene la humildad y a raya el ego. Es necesario examinar ¿a dónde me lleva esto que siento como impulso de Dios?

Ciertamente la gracia de Dios invita a la persona a realizar grandes cosas, aprovechando los impulsos humanos, pero muchas veces acontece que lo que se exalta es el amor propio, por eso la importancia de discernir dicho impulso.

“Magis” vrs. “Plus”

  • El plus va más con el tener, que hace creer, que por lo que poseemos somos más de lo que somos, y también de “la apariencia”; es decir, la imagen que nos lleva al autoengaño.
  • En cambio “lo más”, lo mejor” o “lo mayor”, tiene que ver con el ser y hacer, no es algo externo que embellece y endiosa a quien lo realiza. Una de las características de que lo que se hace en servicio tiene esa connotación de verdadero espíritu, es que convierte a la persona en más humana, más cristiana, ya que juntos estarán lo mejor mío y la gracia del Señor.

👉 Para acceder a todas las sesiones: Curso de Discernimiento Espiritual