Del 1 al 3 de febrero un grupo de personas de nuestra parroquia tuvieron la suerte de realizar unos Ejercicios Espirituales, impartidos por la Hna. Mª Luisa Berzosa.

Fueron unos días de experiencia de oración, de silencio, en el que se ha profundizado en la relación con Dios. A través del silencio, se gana mayor sensibilidad respecto de los propios estados de ánimo y los sentimientos más profundos del corazón. Sólo así es posible “oír” la voz de Dios, reconocer su presencia y dar lugar a una auténtica transformación interior.

Partiendo de la realidad individual de cada uno, acallando los ruidos, a través de la oración personal, charlas y acompañamiento personal, han experimentado el amor de Dios en sí mismos, se han sentido hijos amados y desde esa realidad han escuchado lo que Dios quiere de ellos para mejor seguir a Jesucristo.