Querida comunidad parroquial,

Nos dirigimos a vosotros llenos de gratitud tras haber vivido una Semana Santa verdaderamente especial en nuestra parroquia. En primer lugar, deseamos expresar nuestro más sincero agradecimiento a cada uno de vosotros, quienes con vuestro compromiso y entrega habéis hecho posible que esta semana fuera tan hermosa y significativa espiritualmente para todos nosotros.

Queremos extender nuestro agradecimiento a nuestros sacerdotes, quienes nos han acompañado con su sabiduría y guía durante estos días tan importantes. Agradecemos especialmente a D. Jesús quien nos acompañó el jueves santo, y también a D. Luis, D. Apolinar y D. Alejandro, cuya presencia constante en todas las celebraciones ha sido un verdadero regalo para nuestra comunidad. También queremos reconocer la dedicación de los seminaristas Jaime y Guillermo, así como la labor incansable de nuestra querida sacristana Carmen.

No podemos olvidar a todos aquellos que han contribuido en la preparación del Monumento, en el embellecimiento de nuestra Iglesia, en la organización de las liturgias y en la participación activa en las diferentes ceremonias. Agradecemos a los fotógrafos, al coro, a los lectores, a los monaguillos y a cada uno de vosotros que, con vuestra presencia y vuestras oraciones, nos habéis acompañado en este camino espiritual.

Durante estos días tan especiales, hemos recibido palabras de nuestro párroco, D. Luis, así como la oportunidad de orar juntos con la oración ‘Orar con la Palabra’ en los domingos:

  • El Jueves Santo: no tenemos nada escrito (con la emoción del inicio del riduo pascual, se nos pasó recoger sus palabras); no obstante, el día del amor fraterno, de la institución de la Eucaristía y del sacerdocio, son palabras que aún resuenan en nuestros corazones con profundo significado.
  • El Viernes Santo: Hoy viernes Santo los brazos de Jesús se abren en la cruz para abrazar a la humanidad entera. Abraza tu dolor, tu esperanza de que todo saldrá bien, si confiamos en el Padre. Como Jesús, en ese árbol bendito de la Cruz, pronunciemos sus palabras, “todo está cumplido” muchas cosas en nuestra vida finalizan y empiezan a la vez. Jesús lo aprendió de su Madre en aquel «hágase». También pronunciemos “Padre en tus manos encomiendo mi espíritu”. Oración confiada en que el Padre no nos dejará solos, que Él nos levantará de donde estemos.
  • El Sábado Santo: ¡En soledad con María mujer de la esperanza! Mujer Empoderada en el Amor De Dios. Mujer cuna de la Palabra. Mujer fiel en la cruz. Contigo Madre esta Noche Santa esperamos ver a tu Hijo levantado por la diestra del Padre. ¡Promesa cumplida, con Él, seremos levantados todos! Y como San Pablo podamos decir: «¡Quiero conocerle!, quiero experimentar el poder de su Resurrección!» (Filipenses 3,10) ¡Cristo Vive!

Y finalmente, en el Domingo de Resurrección, celebramos con alegría y renovada esperanza la victoria de la vida sobre la muerte. Y nos ofrece las siguientes palabras: ¡Feliz Pascua de Resurrección a todos!

Os invitamos a revivir estos momentos a través de las fotos que hemos compartido (hacer click en la siguiente imagen), y esperamos que os traigan de vuelta los recuerdos de esta semana llena de significado y amor. Que estas imágenes sean un recordatorio de la presencia viva de Cristo en nuestras vidas y en nuestra comunidad parroquial.

En nombre de toda la comunidad de la Santísima Trinidad de Villalba, queremos agradecer una vez más a cada uno de vosotros por vuestra colaboración, vuestra dedicación y vuestro amor. Que la alegría y la esperanza de la Resurrección permanezcan siempre en nuestros corazones, guiándonos en nuestro camino de fe.