En un mundo donde la diversidad y las dificultades marcan nuestro camino, nos encontramos en la calidez de la acogida, el latido de la solidaridad y el compromiso con los más vulnerables. Inspirados por el llamado del Evangelio, donde el amor se manifiesta en acciones concretas, nos unimos bajo el lema «Voluntariamente, Dónate».

Nos sumergimos en el pasaje de Mateo 25, 35-36, donde cada gesto de amor se convierte en un rayo de esperanza: «Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; peregriné, y me acogisteis; estaba desnudo y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; preso, y vinisteis a verme».

En cada persona que llega a nosotros, vemos una oportunidad para el encuentro sincero, la escucha compasiva y empática y el acompañamiento afectuoso. Nuestro propósito se funda en la búsqueda incansable de la justicia social y en el compromiso con una sociedad más equitativa y solidaria.

Nuestro equipo, compuesto por Ana, Jorge, Rosa, Isabel, Carmen, Laura, Norka, Alberto, Mª Alejandra, Juliana, Javier, Manuel y Julia, teje una red de amor y compromiso que abraza a cada individuo que cruza nuestro umbral.

Los datos del año pasado nos hablan de un compromiso vivo y palpable: 1.576 atenciones de acogida, 950 familias acompañadas, 587 ayudas económicas, 2.227 entregas de alimentos, 450 donaciones de ropa y derivaciones a servicios especializados.

¿Cómo puedes colaborar? La respuesta es sencilla: hazte donante, hazte socio. Con tu apoyo, cada gesto de amor se multiplica y cada vida se ve tocada por la esperanza.

En este viaje de solidaridad, cada paso cuenta, cada corazón comprometido hace la diferencia. Juntos, transformamos realidades, sembramos sonrisas y construimos un mundo más humano y justo.