La Iglesia de Dios es convocada en Sínodo. El camino, cuyo título es «Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión»

Las palabras clave del Sínodo son tres: comunión, participación y misión”. Comunión y misión son expresiones teológicas que designan el misterio de la Iglesia, la naturaleza misma de la Iglesia. Ésta “ha recibido «la misión de anunciar el reino de Cristo y de Dios e instaurarlo en todos los pueblos, y constituye en la tierra el germen y el principio de ese reino» (Lumen gentium, 5)”.

A través de la comunión y de la misión, la Iglesia “contempla e imita la vida de la Santísima Trinidad, misterio de comunión ad intra y fuente de misión ad extra”.

Se insiste en la importancia de la participación como mecanismo para una auténtica praxis sinodal en la Iglesia: “Si no se cultiva una praxis eclesial que exprese la sinodalidad de manera concreta a cada paso del camino y del obrar, promoviendo la implicación real de todos y cada uno, la comunión y la misión corren el peligro de quedarse como términos un poco abstractos”.

 

Nuestro párroco D. José María Crespo nos ofrece unas pinceladas sobre el sínodo, al que estamos convocados toda la Iglesia de Dios

En estado de Sínodo
El Papa Francisco invita a toda la Iglesia a interrogarse sobre la sinodalidad, un tema decisivo para su vida y su misión.
“El camino de la sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenio… Sínodo, es el modo de ser de la Iglesia. Escuchar al Espíritu y a los hermanos” (Papa Francisco).

El camino sinodal tiene tres fases fundamentales.

  1. La fase diocesana se iniciará solemnemente el 9 y 10 de octubre del 2021 en Roma y el 17 de octubre siguiente en cada Iglesia particular, y se prolongará en ellas hasta abril de 2022. Las parroquias de nuestro Arciprestazgo preparemos nuestra aportación el sábado 11 de enero.
  2. La segunda fase, entre septiembre de 2022 y marzo de 2023 tendrán lugar las asambleas regionales y continentales.
  3. Finalmente, en octubre de 2023, tendrá lugar en Roma la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los obispos. Después del Sínodo está prevista la puesta en marcha de las propuestas y conclusiones, lo que implicará nuevamente a las Iglesias particulares.

Explicación del logo
Un árbol grande y majestuoso, lleno de sabiduría y luz, alcanza el cielo. Un signo de profunda vitalidad y esperanza que expresa la cruz de Cristo. Lleva la Eucaristía, que brilla como el sol. Las ramas horizontales, abiertas como manos o alas, sugieren, al mismo tiempo, el Espíritu Santo.
El pueblo de Dios no es estático: está en movimiento, en referencia directa a la etimología de la palabra sínodo, que significa «caminar juntos». El pueblo está unido por la misma dinámica común que le insufla este Árbol de la Vida, desde el que inicia su caminar.
Estas 15 siluetas resumen toda nuestra humanidad en su diversidad de situaciones vitales de generaciones y orígenes. Este aspecto se ve reforzado por la multiplicidad de colores vivos que son en sí mismos signos de alegría. No hay jerarquía entre estas personas que están todas en el mismo plano: jóvenes, ancianos, hombres, mujeres, adolescentes, niños, laicos, religiosos, padres, parejas, solteros, sanos, discapacitados; el obispo y la monja no están delante de ellos, sino entre ellos. Con toda naturalidad, los niños y luego los adolescentes abren su camino, en referencia a estas palabras de Jesús en el Evangelio «Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y a los entendidos y las has revelado a los niños». (Mt 11,25)

Oración del Sínodo
Estamos ante ti, Espíritu Santo, reunidos en tu nombre.
Tú que eres nuestro verdadero consejero:
ven a nosotros, apóyanos, entra en nuestros corazones.
Enséñanos el camino, muéstranos cómo alcanzar la meta.
Impide que perdamos el rumbo como personas débiles y pecadoras.
No permitas que la ignorancia nos lleve por falsos caminos.
Concédenos el don del discernimiento,
para que no dejemos que nuestras acciones se guíen
por perjuicios y falsas consideraciones.
Condúcenos a la unidad en ti,
para que no nos desviemos del camino de la verdad y la justicia,
sino que en nuestro peregrinaje terrenal nos esforcemos por alcanzar la vida eterna.
Esto te lo pedimos a ti,
que obras en todo tiempo y lugar,
en comunión con el Padre y el Hijo
por los siglos de los siglos. Amén.

Documento preparatorio
Puedes acceder al documento preparatorio haciendo clic en la siguiente imagen:

El Sínodo es una invitación para que cada diócesis, también la nuestra, nos embarquemos en un camino de profunda renovación inspirada por la gracia del Espíritu de Dios. Así, la fase diocesana del proceso sinodal debe ser una oportunidad para escuchar más profundamente la voz del Espíritu, aumentar la participación, mejorar la calidad del diálogo, discernir sobre estos temas, fortalecer la conversión en actitudes y habilidades, y animar el sentido de conexión con la gente y con la Iglesia local, regional y global. El Arzobispado de Madrid ha puesto en marcha la página web sinodo.archimadrid.es, en la que se detalla cómo se va a recorrer el camino sinodal en Madrid, con distintos materiales y cuestionarios online.