Con esperanza, damos inicio a nuestro itinerario cuaresmal con las inspiradoras palabras de nuestro párroco. En este tiempo litúrgico, nos embarcamos juntos en una travesía de reflexión, renovación y crecimiento espiritual en nuestra parroquia. Conscientes de la importancia de este período, trazaremos un lienzo de experiencias compartidas, nos sumergiremos en la profundidad de nuestro ser, cultivando la paz interior y fortaleciendo nuestro vínculo con Dios y con nuestros hermanos.

Miércoles de Ceniza

Iniciamos la cuaresma con un signo, la ceniza, que nos recuerda nuestra caducidad y la importancia de centrar nuestras fuerzas y nuestra mirada en lo importante: En el amor.

Un amor traducido en compasión, en caridad fraterna, en oración. Iniciamos con una lectura del Evangelio que nos recuerda hacer todo con la discreción del espíritu, sin bombos ni platillos. ¡Cuánto nos cuesta reconocer que solo basta con entrar en nuestro corazón y nuestro Padre que está en lo secreto nos recompensará!

En esta cuaresma, invitados a centrarnos no tanto en nuestro pecado cuanto en su Amor Gratuito. Si nos centramos en nuestros fallos vendrá la tristeza a anidar en nuestros corazones. Si apuntamos a su Amor Gratuito la alegría será grande y la contagiaremos a los demás.

Que esta cuaresma la vivamos no como una más, sino como oportunidad del alma, de encuentro con Cristo, con nuestros hermanos y con nosotros mismos.

  • Abramos el corazón a la limosna que no es otra cosa que compartir lo que tenemos con nuestros hermanos y con la comunidad.
  • Abramos nuestro cuerpo al ayuno y la abstinencia, que nos hará trascender lo material y darnos cuenta que no solo de pan vive el hombre
  • Abramos nuestra mente a una oración desde la confianza en el Padre Bueno que nos acoge a todos.

Iniciamos con ceniza, terminaremos con fuego de resurrección. Juntos esperemos que ese fuego arda en nuestros corazones y nos lleve a transformar nuestras vidas y la de nuestros hogares.

Un abrazo fraterno.

P. Luis Murillo Madrigal

Itinerario Cuaresmal

Con la intención de que este tiempo de Cuaresma sea un tiempo vivido en sencillez, que nos conduzca hacia una transformación interior, donde florezcan la compasión, la generosidad y la fraternidad. Juntos, como comunidad parroquial, abrazaremos la oportunidad de crecer espiritualmente y acercarnos más a la luz del resucitado que guía nuestro caminar.

Bajo la guía de nuestro párroco, a lo largo de la Cuaresma, iremos explorando, cada semana, algunos valores del Evangelio:

  • Primera Semana de Cuaresma: Cultivar la Interioridad

Descubriremos la riqueza de nuestro mundo interior y fortaleceremos nuestra comunión con Dios.

  • Segunda Semana de Cuaresma: Ser Testigos de la Bondad de Dios

Nos inspiraremos para reconocer y celebrar la bondad que nos rodea, recordando siempre el amor infinito de Dios.

  • Tercera Semana de Cuaresma: Compartir Fraternidad

Nos uniremos en comunidad, extendiendo la mano de la amistad y la solidaridad a todos los que nos rodean.

  • Cuarta Semana de Cuaresma: Ser Buscadores de Luz

Enfocaremos nuestra búsqueda en la luz de Dios, encontrando esperanza y orientación en tiempos de oscuridad.

  • Quinta Semana de Cuaresma: Ser Sembradores de Esperanza

Plantaremos las semillas de la esperanza cultivando la unidad y el amor en cada paso de nuestro camino.

¡Que este viaje nos llene de renovación espiritual y nos guíe hacia una vida más plena y significativa en el encuentro con Cristo Resucitado, para que podamos compartir su luz y amor con el mundo que nos rodea!