En la solemnidad del Corpus Christi toda la familia de Cáritas Diocesana de Madrid, celebramos el Día de la Caridad, que no es otra cosa que celebrar la presencia de Cristo en nuestras vidas y hacerla presente en las calles en forma de Amor compartido y entregado.

Hoy los cristianos rememoramos el amor infinito y apasionado de Dios por la humanidad. Nuestra labor como obra social de la Iglesia es, como dice nuestro lema, estar «Cerca de las personas» para acompañarlas, para que sus vidas sean justas y dignas, para que se sientan queridas y valoradas.

Por eso hemos salido a las calles de nuestro pueblo, con personas voluntarias, para acercarnos a quienes más nos necesitan, para que sepan que estamos aquí y en qué podemos ayudarles. Ahí informamos acerca de los recursos y servicios que ofrecemos a las familias, que van mucho más allá de la ayuda asistencial, pasan por el acompañamiento integral y el apoyo a la formación, la búsqueda de empleo o vivienda, el emprendimiento…

En este curso hemos atendido a 502 familias; realizado 1306 entrevistas en acogida; repartido alimentos para 1450 personas; lo más importante es el saber que seguimos acompañando a estas personas y a otras más a quienes les hemos ofrecido acciones para paliar la falta de una vivienda adecuada; a otros, un cauce para conseguir un empleo; en otras ocasiones, ha sido una ayuda para hacer frente a pagos de suministros o necesidades básicas, o bien, hemos ofrecido programas de formación o de asesoría o asistencia psicológica… y, sobre todo, escucha, calidez y cercanía.
Todo ello ha sido gracias a la colaboración económica de todos reflejada en los 29778€ de donativos y suscripciones.

Nuestras puertas están abiertas a la fraternidad y a la solidaridad. Tenemos la misión y la obligación de contagiar la alegría del Evangelio. Y tenemos la dicha, y también la responsabilidad, de compartir nuestra manera de Amar al otro.

Queremos seguir estando cerca del otro «para que conozcan, a través de la labor social que realizamos en Cáritas de Villalba, la generosidad y el amor de Jesús».

Gracias por vuestra colaboración, ayuda, entrega y oración.

Os dejamos las fotos de la celebración y procesión del día de la Solemnidad de Corpus Christi, se puede verlas pinchando en la imagen 👇👇👇

Compartimos también las imágenes de la cuestación de Cáritas parroquial el día 18 de junio, para verlas haz click en la imagen 👇👇👇

El 18 de junio, los jóvenes del grupo de teatro «La Compañía» nos han presentado, por primera vez en nuestra parroquia, un magnifico espectáculo de microteatro.

Agradecemos a estos jóvenes de hoy, mañana y siempre, por dedicar su tiempo y talento para que pasáramos una noche estupenda.

Gracias a Pedro Martín Cedillo, el autor de textos, por este regalo de obras tan interesantes y divertidas y a Pilar por la preparación de escenas.

Gracias a la comunidad parroquial por su gran apoyo.

Gracias a Dios por continuar inspirando tanta sabiduría y hacerla realidad.

Os invitamos a ver las fotos de «Noche de microteatro» pinchando en la imagen 👇👇👇

Os compartimos lo que ha ocurrido en las últimas semanas.

Eucaristía de la Santísima Trinidad 

El 12 de junio celebramos la gran fiesta de nuestra parroquia: La Santísima Trinidad. Además, se clausuró el curso de Lectores y Ministros Extraordinarios de la Comunión. Gracias a todos por el interés en seguir formándoos y el servicio a la comunidad. Al finalizar la eucaristía disfrutamos de un aperitivo en los salones parroquiales.

Las fotos se puede ver pinchando en la imagen 👇👇👇

Peregrinación de la Hermandad del Rocío de Collado Villalba 

La primera semana del junio, la Hermandad del Rocío de C. Villalba viajó a tierras marismeñas a ver a la Virgen del Rocío y poder hacer su peregrinación de Almonte a la ermita del Rocío.
Muchos son los actos a los que acudieron: presentación de Hermandades, camino, eucaristías, rosario, saludo a la Virgen, salto de la reja.
Han sido unos días llenos de emociones y además de traerse muchos recuerdos y un poquito de arena…. nos han dejado estas fotos de su viaje, las puedes ver pinchando en la imagen 👇👇👇

El 13 de junio celebramos el día de San Antonio de Padua, la fiesta del patrón de Villalba Pueblo.

Os compartimos una reflexión de D. David Amado, el párroco de la Parroquia El Enebral.

El Papa león XIII le llamó “el santo de todo el mundo”, porque donde llegaba noticia de su existencia, y llegaba a muchas partes como llegó a Collado Villalba a través la predicación de los franciscanos, encandilaba a los fieles que, en seguida le tomaban devoción. Y su aura de bondad y fama de milagrero se sobrepuso a su misma biografía hasta el punto de que habiendo nacido en Lisboa desde el principio fue conocido como de Padua, donde ejerció gran parte de su ministerio y adquirió mayor notoriedad.

Tampoco es muy conocido que fue un grandísimo teólogo. Ya franciscano regentó una cátedra en Bolonia, en el primer Estudio de los frailes menores. Entonces le escribió san Francisco: «A fray Antonio, mi obispo, el hermano Francisco, salud. Me agrada que enseñes sagrada teología a los hermanos, con tal que, en el estudio de la misma, no apagues el espíritu de oración y devoción, como se contiene en la Regla». Y así lo hizo. Su obra, por la que ha merecido el título de Doctor Evangélico, son unos sermones que escribió para que sus hermanos de orden dispusieran de material para la predicación.

Es por ello que en las primeras representaciones del Santo aparece este con un libro en las manos. Más adelante sobre ese libro se colocó una imagen de Jesús. Y esta es la representación más frecuente que se hace eco de una tradición que refiere que un día le vieron con el Niño Jesús en brazos. Pero, más allá de ello, representa bien lo que fue la predicación y la vida de Antonio, para quien anunciar el evangelio era mostrar a Jesús, verdadero amigo de los hombres, compasivo con los pobres y cercano a cualquiera que estuviera necesitado de compañía o de consuelo.

En un sermón de Navidad escribió refiriéndose al momento en que se describe a Jesús colocado en el pesebre: “Ecce bonitas, ecce paradisus” (Ahí está la bondad, ahí está el paraíso”).
El paraíso está en Jesús, en quien se manifiesta la bondad de Dios para el hombre. Por lo mismo llevamos el paraíso cuando, siguiendo las enseñanzas de Jesús e impulsados por su amor, introducimos a otros en el paraíso.

Las diferentes tradiciones sobre el santo nos lo describen preocupado por los pobres. Hay milagros que refieren su llamada al desprendimiento, como el de aquel avaro que llevaban a enterrar y que el santo advirtió que carecía de corazón y que lo encontrarían en el mismo cofre en el que encerraba sus riquezas; otros nos hablan de como, entregando toda la comida del convento a los menesterosos que llamaban a sus puertas no se agotaba la reserva de la alacena; un tercero cuenta que ante las burlas de uno que negaba la presencia de Jesús en la Eucaristía y que pretendía que el jumento hambriento elegiría la ración de trigo, este se postró ante el Santísimo que el santo sostenía en la Custodia.

Son historias que, decantado lo que puedan tener de legendario, unen en la persona de Antonio el amor apasionado por Jesús, del que no se cansaba de hablar en sus enseñanzas y de ejemplificar son sus obras, y la delicada preocupación por el prójimo. Un santo que, en su vida misma, es como un atajo para conducirnos a lo esencial del evangelio: a conocer la caridad, con la que Dios nos ama y con el que hemos de amar a los que nos rodean.

Por eso, quien se siente atraído por san Antonio, acaba reconociendo que no es más que el reflejo, ciertamente admirable, de Jesús, a quien él contemplaba especialmente en la Cruz, porque en ella aceptó ser desfigurado para embellecer al hombre.

El día 12 de junio celebramos la Solemnidad de la Santísima Trinidad, es un gran día para toda la comunidad de nuestra parroquia. Con este motivo compartimos unas palabras del párroco José María Crespo.

Un año más vamos a celebrar la fiesta de nuestra Parroquia, la fiesta de la Santísima Trinidad. Llevar el nombre la Trinidad nos mueve de un modo especial a manifestar este don en la vida de nuestra comunidad.

Un misterio es todo aquello que no podemos entender con la razón. Es algo que solo podemos comprender cuando Dios nos lo revela. El misterio de la Santísima Trinidad -un solo Dios en tres Personas distintas- es el misterio central de la fe y de la vida cristiana, pues es el misterio de Dios en Sí mismo.

El dinamismo de la Trinidad es un dinamismo de amor, de comunión, de servicio recíproco, de compartir. Una persona que ama a los demás por la alegría misma de amar es reflejo de la Trinidad. Una familia en la que se ama y se ayudan unos a otros es un reflejo de la Trinidad. Una parroquia en la que se quiere y se comparte los bienes espirituales y materiales es un reflejo de la Trinidad.

Celebramos la solemnidad de la Santísima Trinidad, que presenta a nuestra contemplación y adoración la vida divina del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo: una vida de comunión y de amor perfecto, origen y meta de todo el universo y de toda criatura ¡Dios! En la Trinidad reconocemos también el modelo de la Iglesia, en la que estamos llamados a amarnos como Jesús nos ha amado. Y el amor es señal concreta que manifiesta la fe en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Todos los domingos celebramos juntos la Misa, y la Eucaristía es como la zarza ardiente en la que humildemente vive y se comunica la Trinidad. La Trinidad no es un complicado tratado sobre el misterio de Dios lleno de dogmas y extendido en cientos de volúmenes. No. La Trinidad es el movimiento de Dios en la humanidad que nos entrelaza haciéndonos hermanos.

Parafraseando a Jesús podríamos decir: “La Trinidad se parece a una bella danza en grupo a la que tú estás invitado a participar.”

Oración

Trinidad Santa, danos el don de descubrirte presente en nuestra vida. Ayuda a nuestra Parroquia a ser un Icono de tu Amor, viviendo en comunión y servicio. ¡Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo!

¡Feliz fiesta de la Santísima Trinidad!

Un abrazo y mi oración por todos,
José Mª Crespo, Párroco

El domingo 5 de junio nos reunimos todos los grupos de Juveniles para terminar este maravilloso curso. Y que mejor día para hacerlo que el día de Pentecostés, cuando Dios nos envía el Espíritu Santo con sus siete dones para guiarnos en el camino de le Fe.

Empezamos el día con juegos para despertarnos y sobre todo para seguir creciendo como grupo.

Luego nos repartimos por grupos para evaluar lo que ha significado este año para cada uno de nosotros.

Compartimos a través de un objeto lo que hemos vivido y sentido este curso: una cámara de fotos para recordar los buenos momentos, una cuerda con sus nudos que se han ido deshaciendo a lo largo del año, un corazón, un libro por todo lo que aprendemos…. y así muchas cosas más, que hemos compartido desde el corazón ❤

Después ensayo de canciones y un rato de tiempo libre. Para acabar nuestra mañana compartiendo Eucaristía con nuestras familias.

Y con la fuerza del Espíritu Santo damos por concluido nuestro año y quedamos a la espera de nuestra actividad de verano: el Camino de Santiago. 

Esperamos y deseamos seguir viéndonos en las Eucaristías de los domingos y en los eventos de nuestra parroquia.

¡¡¡¡¡ Gracias a todos: familias, chicos y chicas, catequistas, sacerdotes y toda nuestra comunidad de la Santísima Trinidad!!!

La galería de las fotos se puede ver haciendo click en la imagen 👇👇👇